Valores Ambientales

La Montaña de Tindaya es una de las más antiguas del Archipiélago. Está formada fundamentalmente por traquita, siendo la única en Canarias. Por eso es blanca y resplandece bajo los rayos del sol. Por su forma piramidal, altitud y por el llano que la rodea, resulta igualmente peculiar. Por sus valores naturales, la montaña está declarada Monumento Natural, además de Área de Sensibilidad Ecológica y Zona de Protección Especial para Aves (ZEPA).

 

FLORA Y FAUNA

A pesar de su aspecto rocoso y a falta de estudios detallados sobre hongos, líquenes e invertebrados no artrópodos, la montaña de Tindaya y los llanos semiáridos colindantes están ocupados por más de 70 especies de plantas, aves, reptiles, mamíferos y artrópodos; muchos de ellos endemismos de distribución reducida e incluidas en las diversas categorías de protección legal a nivel regional, nacional e internacional.

En el entorno de la montaña de Tindaya se han descrito 12 taxones de aves. Mientras que las laderas y planos colindantes están ocupadas por aves esteparias como la avutarda, en los escarpes rocosos de la montaña mora el cuervo común y diversas aves rapaces, de las que destacamos los recientes hallazgos de lechuza.

    Hubara (avutarda)

Las hubaras de Canarias todavía se encuentran en Lanzarote, La Graciosa y Fuerteventura (donde son conocidas como avutardas) y forman una subespecie aparte, Chlamydotis undulata fuertaventurae, siendo una de las aves de la Unión Europea en mayor peligro de extinción, por varios factores, como la destrucción de su hábitat por el desarrollo e incremento del turismo, la caza furtiva, y  las colisiones con los tendidos eléctricos, quedan menos de 700 ejemplares  (entre las tres islas) y se encuentra catalogada como en peligro de extinción según el último Catálogo Nacional de Especies Amenazadas (CNEA)

La hubara se considera, según una ley del Gobierno de Canarias, el símbolo natural de la isla de Fuerteventura conjuntamente con el cardón de Jandía.

 

    Tojía blanca (Asteriscus schultzii)

 

En la montaña se han descrito 22 taxones de plantas, algunas de ellas endemismos exclusivos del territorio insular, como es el caso del jorao o el gongarillo majorero, especies cuya distribución mundial solo ocupa algunas áreas de Fuerteventura. Otras como la cuernúa, la tojía blanca o la jarilla, son otros endemismos canarios cuya distribución se comparte con algunas áreas de Lanzarote.

La montaña de Tindaya también alberga las tres especies endémicas de reptiles descritas para Fuerteventura y Lanzarote, entre las que destacamos la lisneja, un escurridizo escíncido de difícil observación muy poco estudiado.

El grupo de los mamíferos representados en la montaña de Tindaya está dominado por especies invasoras e introducidas por el hombre (ardilla moruna, conejo europeo y erizo moruno).

No obstante, en algunos lugares se han hallado restos biológicos de musaraña canaria, un pequeño roedor hocicudo endémico de las islas de Fuerteventura y Lanzarote, y ejemplares de murciélago montañero, un pequeño volador de hábitos nocturnos muy poco estudiado en el territorio insular.

El grupo de los invertebrados artrópodos está representado por más de 50 taxones, con dominancia del grupo de los escarabajos, entre los que destacamos Melesmana lineatum, un carábido de distribución reducida al norte de Fuerteventura y la Isla de Lobos.  

Guanil Colectivo

 

RELACIÓN DE LA FLORA EN LA MONTAÑA DE TINDAYA. (fuente Cabildo Fuerteventura)

 

PONENCIAS

  • Perera Betancort, Mª A. 1994: «La montaña de Tindaya. Valor natural, valor cultural. Análisis legal». VII Jornadas de Estudios sobre Fuerteventura y Lanzarote (Puerto del Rosario, 1995), I: 497-522.
  • Perera Betancort, Mª A., Belmonte Avilés, J. A., at all. 1996: «Tindaya: un estudio aqueoastronómico de la sociedad prehispánica de Fuerteventura».